Por fin se han decidido por incorporar una doble cámara para poder realizar vidoeconferencia. En lugar de utilizar la tan denostada videoconferencia ofrecida por la red UMTS, se ha optado por un software propietario (llamado Face Time video) que ofrece este servicio vía wifi. Esto incrementa considerablemente el ancho de banda disponible y, al mismo tiempo, la calidad de la imagen.
Otro aspecto que se ha mejorado es la duración de la batería, indicando que proporciona un 40% más de tiempo de conversación que el 3GS. Esto es un tema importante ya que es bien sabido que un si usamos todas las funcionalidades que ofrece un iPhone dificilmente llegamos con batería al final del día.
Respecto a la cámara, han hecho importantes mejoras, ofreciendo 5 mega píxeles y grabación de video en alta definición. La cámara ya (por fin) incorpora flash.
La pantalla también ha mejorado, ofreciendo una mayor resolución que la que nos proporcionaban el resto de modelos de iPhone.
Finalmente ni que decir tiene que incorpora el nuevo iPhone OS4, cuya principal ventaja frente al actual es la multitarea.
En definitiva, un nuevo producto que viene a mejorar el iPhone 3GS pero que tampoco podríamos calificar como «revolutionary» o como «amazing new product». Es cierto el ya famoso dicho de que Apple es muy lenta a la hora de incorporar determinadas funciones que son un estándar en otras marcas. Ahora bien, cuando las incorporan, hay que reconocer que lo hacen muy bien.
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