Llevamos muchos años viendo y viviendo demostraciones de realidad virtual. Esta vez la realidad virtual se basa en 3 muros de 10×10, una superficie de las mismas medidas y unas gafas diseñadas especialmente para que lo que se proyecte sobre estos muros aparente ser real. El hecho de construir un escenario sobre el que se proyecta esta realidad, permite al usuario moverse «libremente» por la habitación desplazándose sin necesidad de un joystick. Como se ve en el vídeo la cosa parece bastante real, el usuario parece sorprendido sobre todo en el momento en el que vuela hasta lo alto de un muro asomándose al otro lado. Yo quiero probarlo.
Fuente: Offworld