Está claro que, a medida que pasa el tiempo, el libro electrónico se va haciendo su hueco en el abultado mundo de la tecnología. Pasan los años y cada vez veo más personas interesadas en adquirir uno de estos aparatos. En la actualidad existen diferentes fabricantes. Sony es un clásico que lleva casi 20 años en esto de los libros electrónicos, y pocos pueden decir algo así. Sin embargo nunca dejaron de ser un fabricante de hardware, siendo prácticamente incapaces de ofrecer un buen catálogo de libros con un lector interesante.
¿Combinamos una tienda con un lector de libros electrónicos?
Actualmente el modelo que se impone es el que diseñó Amazon con su famoso Kindle: disponer de un amplio catálogo de libros electrónicos y proporcionar a tus clientes un dispositivo con el que puedan acceder a tu catálogo. En España tenemos casos como los de El Corte Inglés o Tirant lo Blanch. Lo que está claro es que un lector de libros electrónicos, por muy bueno que sea, si no tiene asociada una tienda, poco tiene que hacer.
En esto vuelvo a incidir en el pionero y el que, a mi entender, ofrece una mejor solución: Amazon. Esta empresa fue una de las primeras en ofrecer un dispositivo con acceso directo a su tienda. El usuario simplemente tenía que encender el libro y desde el propio aparato podía comprar los libros que más le interesasen. Todo ello sin cables y sin necesidad de conectarlo a ningún ordenador. Con el tiempo mejoraron mucho los lectores y a día de hoy son los que ofrecen una de las mejores combinaciones producto/servicio del mercado.
Amazon desembarca en España
Esta mejora ha sido todavía aún mayor desde que empezaron a distribuir sus tiendas a lo largo y ancho del globo, como por ejemplo la más o menos reciente inauguración de Amazon.es y la consiguiente disponibilidad de gran parte de los productos de esta empresa en España. Ofrece un extenso catálogo de libros en español y unos lectores de libros electrónicos excelentes.
Las novedades de Amazon: Kindle Paperwhite
Hoy queremos resaltar la llegada de un nuevo modelo: Kindle Paperwhite. Como su propio nombre indica se caracteriza por tener una pantalla con un fondo prácticamente blanco. Además han aumentado la resolución, con lo que los textos se ven todavía más nítidos que antes, y han incluido iluminación en la propia pantalla para poder leer el libro en la oscuridad. Tiene dos versiones, una con conexión wifi y otra que, además, añade la conexión 3G. Si bien el más interesante por precio el wifi, la versión 3G no deja de ser curiosa. Nos da acceso a la red 3G de telefónica sin coste alguno y sin contratos. La única diferencia es que podríamos descargarnos un libro en cualquier lugar sin necesidad de wifi, aunque la verdad es que esto es algo poco habitual.
Un tablet no es un lector de libros electrónicos
Ya para terminar recordaros que un lector de libros electrónicos no es un tablet y un tablet no es un lector de libros electrónicos. Quiero hacer especial hincapié en lo segundo: en un tablet se pueden leer libros electrónicos, pero para una lectura prolongada no son aparatos adecuados.